Y es que estos nipones son capaces de todo, como nos han demostrado varias veces, y en esta ocasión lo que hicieron fue llevar las prácticas fuera de la academia y atreverse a convertir a esta apacible señora en el Rey de los Demonios de Bola de Dragón.
Si unos estudiantes de maquillaje han podido hacerlo, ¿por qué no lo hacen en un largometraje como Dende manda?
Está logradísimo, he visto las imágenes y me he quedado con la boca abierta. Y sin un presupuesto desorbitado. Lo que habría que preguntarse es justamente lo que planteas al final del artículo.
ResponderEliminarTremendo! Logradissimo! Pero más que Piccolo parece al padre de Piccolo. Piccolo, si no ando despistado para nosotros es Satanàs Cor Petit. Espectacular!
ResponderEliminarEs Piccolo Daimaô, el padre de Piccolo. Satanàs Co Petit se le llamaba a Piccolo (hijo) en la versión catalana.
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